Los colchones de muelles ensacados o cilíndricos están fabricados por un núcleo formado por una estructura de muelles que tienen forma de cilindros. Estos colchones llevan los muelles ensacados para evitar que con los movimientos y el rozamiento de los muelles se produzcan ruidos y sonidos molestos para la persona que está durmiendo. Los muelles ensacados están fabricados con alambre de hierro de alrededor de dos centímetros formando una carcasa que normalmente está recubierta por diversos materiales, como fibras o espumas. Aunque también influyen el resto de materiales que componen el colchón, dependiendo de la altura de esa carcasa la firmeza será mayor o menor. En la actualidad la tapa de tela puede estar acolchada por planchas de espuma viscoelástica o de látex que añaden una mayor adaptabilidad al cuerpo del durmiente mejorando la sensación de descanso y suponiendo una innovación con respecto a los colchones de muelles tradicionales haciendo que este tipo de colchones siga siendo una buena opción a la hora de elegir un sistema de descanso.